viernes, 12 de julio de 2013

Los Golfistas de Edimburgo


@Juannutt

La Honorable Compañía de Golfistas de Edimburgo, ahora con sede en Muirfield, tienen la distinción de ser el club de golf organizado verificable más antiguo del mundo, aunque el juego de golf es varios siglos mayor. Los registros del Club fechan continuamente desde 1744, cuando se produjeron trece "Reglas de Golf" para su primera competencia. En 1891, el club construyó un nuevo campo de golf privado de 18 hoyos en Muirfield, haciendo el campeonato abierto alli. Esta situación causó cierta sensación de malestar en Musselburgh, que perdió el derecho a celebrar el Open desde ese momento en adelante. Old Tom Morris fue el diseñador del nuevo campo. Se ha modificado y actualizado varias veces desde entonces, de manera significativa hasta finales de 1920, después de lo cual se ha mantenido estable. El primer Abierto celebrado en el campo nuevo en 1892 fue el primer torneo en la historia donde se jugó en cuatro rondas o 72 hoyos.

Una semana diferente


@Juannutt

El Open es una semana diferente, ya que uno ve a los jugadores compitiendo en situaciones climatológicas extremas en campos poco maquillados. Siempre me gustó ver como la bola rueda por las dunas y pasa por los greenes a veces sin pararse, donde un putt de treinta metros de largo es algo relativamente normal. Para el ojo común el campo puede verse feo o descuidado, pero es precisamente esa condición “original” lo que hace que el evento sea tan auténtico. Es un golf donde la imaginación en los golpes cortos crucial, donde el manejo del viento con golpes bajos es imperante y donde la paciencia y el temple valen oro.

miércoles, 3 de julio de 2013

Una idea para expandir el golf y hacerlo llegar a todos


@Juannutt

Con la creación del Fondo Nacional del Deporte, la vía más fácil para conseguir recursos para la operación y mantenimiento de campos públicos es a través de un Proyecto aprobado bajo la Ley de Deporte, qué fácil sería hacer un presupuesto para recuperar uno de los seis campos que dejaron de ser mantenidos y abrirlo al público para el goce y disfrute de todos; una vez el campo operativo, la FVG se encargaría con la Escuela Nacional de Golf de impartir clases para que cualquier interesado pueda acceder a nuestro maravilloso deporte. Luego, uno a uno se pueden seguir abriendo los campos, y si se logra esto, ya existirían en nuestro país al menos siete u ocho campos PUBLICOS a los cuales cualquier persona pudiese tener acceso. Yo no lo veo tan complicado, las ganas existen, los recursos se levantan, la capacidad técnica la tenemos a disposición. Avancemos en esa dirección y todos saldremos ganando.