@juannutt
En muchas ocasiones me ha tocado jugar partidas de golf con
personas que desconozco, desde grandes empresarios hasta destacados atletas de
otras disciplinas, y esos días más que golfista me convierto en un analista psicológico
de mis compañeros de juego. Es curioso ver como reacciona cada individuo a la adversidad
en el campo de golf. Generalmente el primer reto que enfrentan es el temor o la
presión que les causa estar jugando con un profesional, muchas personas se desahogan
con humor, otras dan excusas adelantadas, algunas reaccionan positivamente
suben sus estándares para producir mejores resultados. Luego del duro comienzo
de la ronda viene la prueba de la adversidad, ¿como reaccionan a un mal golpe o
a una situación difícil?, algunos le pegan a la bola como si no le importara,
otros le echan la culpa al Caddie, ¡otros hasta levantan la pelota! dándose por
derrotados y se enfurecen batuqueando los palos; también hay individuos que
asumen el reto con responsabilidad y buscan la mejor solución posible. Otra
prueba interesante tiene que ver con los putts cortos, que dividen a los
jugadores en dos grupos, los que tienen el valor y la confianza para meter la
bola en el hoyo, y los que prefieren levantarla cuando la bola está cerca del
hoyo dando por contado que la iban a embocar, ¿o será que tenían miedo a
fallarla?. Es interesante también ver como reaccionan a los consejos, si están
abiertos a sugerencias y hacen preguntas a cerca del juego buscando mejorar, o
simplemente descartan cualquier sugerencia o tip que uno proponga. Pero la
prueba final es la definitiva para hacer el análisis completo, y consiste en la
cantidad de golpes que se anotan, ya que no hay nada más sencillo que contar, y
cuando un golfista dice menos golpes de los que realmente hizo demuestra que se
esta engañando si mismo y tratando de aprovecharse de los demás. Con todos esos
exámenes fácilmente se puede hacer una diagnóstico de cómo esa persona probablemente
se desenvuelva fuera del campo de golf, como enfrenta las adversidades y como
maneja sus miedos, ¿es controlado o impulsivo?, ¿es honesto, vivo, o no es de
confiar?… Todos somos distintos, con virtudes y defectos, aproveche el golf no
solo para recrearse, si no también para crecer como persona, mejorar y
conocerse más en profundidad.
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